Szikla kórház (en castellano "Hospital en la roca", en inglés "Hospital in the rock") es una visita muy especial y recomendable. Como su nombre indica está "en la roca", es decir, dentro de una montaña. Esta especie de museo-exhibición consta de un laberinto de galerías y túneles excavados en las montañas de Buda, esencialmente bajo el Castillo de Buda, que se utilizaron como hospital durante la segunda guerra mundial y como búnker en caso de ataque nuclear en la guerra fría.
La historia de este lugar, como explican durante la visita, comienza muchos siglos atrás, cuando los habitantes de Buda construían cuevas donde almacenar víveres. Con el tiempo algunas de estas cuevas se unieron formando túneles, y ya en la segunda guerra mundial, con Budapest asediado por el ejército rojo se utilizó como un gran hospital-refugio, ya que estaba a salvo de los bombardeos soviéticos. Posteriormente, durante la época comunista fue ampliado para servir de macrorefugio en caso de un ataque nuclear americano. Finalmente, el hospital volvió a abrir durante un breve periodo de tiempo en 1956, cuando la revolución húngara contra la URSS.
Hoy en día se hallan en su interior cientos de figuras de cera y materiales que emulan el antiguo hospital durante la guerra: médicos, enfermeros, soldados heridos, militares, literas... tan solo falta el olor a podedumbre, putrefacción y hacinamiento, y el bullicio y el correcalles al llegar los heridos, que sobrepasaban ampliamente la capacidad del hospital (con unas 50 camas, aunque llegaba a alojar más de 500 de heridos) hasta el punto de tener estos que compartir cama o estar en el suelo en cualquier rincón, a la espera de ayuda médica o la muerte en el peor de los casos. A día de hoy aún funciona el viejo sistema de ventilación, aunque debido al gran ruido que genera tan solo se activa durante la noche.
Las visitas son en grupo y con guía obligatorio, salen cada hora y el recorrido dura unos 60 minutos, parando en varios sitios para escuchar las explicaciones del guía, pudiéndose elegir entre el inglés o el húngaro. Abre de lunes a domingo a las 10 de la mañana y cierra a las 8 de la tarde (a las 7 sale el último grupo). La dirección es Lovas út 4/c.
El precio es de 3.600 forint (12 €) para todo el mundo excepto menores de 26 años, quienes pagan la mitad. No hay el tan ansiado descuento de estudiante. Es un poco caro, pero teniendo en cuenta que son guiadas y duran una hora se entiende que sea un pelín elevado.
Como no está permitido hacer fotos en su interior he buscado algunas por internet:
Muy interesante. Fue una de las visitas que me perdí cuando estuve en Budapest. Sin duda cuando vuelva realizaré una visita.
ResponderEliminarHe subido una nueva entrada en mi blog, recomendándote. Espero que te guste. Envíame un mail privado si puedes, para poder consultarte unas cuestiones (no encuentro un correo en tu blog para poder formulártelas).
Gracias
Hola Roberto, muchas gracias por tu entrada! Efectivamente tenías razón, pero ya está solucionado: la dirección es desdehungriablog@gmail.com
ResponderEliminarLa visita al hospital está muy bien, te gustará seguro. Un saludo y feliz fin de semana!
Excelente, una visita única. Está todo como si se hubiese detenido el tiempo. Uno alli dentro cree haber viajado en el tiempo. Imperdible
ResponderEliminarEs una pasada si, totalmente de acuerdo. Un saludo!
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